¿Tu primer día de trabajo? ¡Causa una buena impresión!

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Lo hemos oído muchas veces. La primera impresión es lo que cuenta. Y es así en todos los ámbitos de nuestra vida, también en el laboral. Debes causar una buena impresión a través de tu currículum y después hacer lo mismo en tu entrevista de trabajo. Pero aquí no acaban las primeras impresiones.

  • Vístete de forma correcta. Escoge prendas que sean acordes con la imagen de la empresa.  No olvides llevar la ropa limpia y bien planchada. Y acuérdate de cosas como el peinado, el maquillaje o las uñas. Tu imagen global debe ser cuidada y limpia.
  • Fuera malos olores u olores fuertes. Lo vimos cuando hablamos de que no hacer nunca antes de una entrevista de trabajo, el aroma que desprendemos es tan importante cómo nuestra imagen. Cuida tu aliento. Si eres fumador, evita hacerlo antes de entrar a trabajar ese día. Y evita llevar un perfume demasiado fuerte que pueda molestar a la gente.
  • Ve descansado. El día antes de empezar tu nuevo trabajo vete a la cama pronto y descansa. Levántate con tiempo, desayuna y arréglate tranquilamente. Y cuando llegues a la empresa estarás cargado de energía y con ganas de empezar. Eso da una buena impresión. Para nada, llegar con un semblante cansado.
  • Llega puntual. Ser impuntual da mala imagen. No llegues tarde el primer día (ni los siguientes). Si no tienes controlado cuánto te costará llegar, sal con más margen tiempo de casa.
  • Mantén una actitud positiva. Cierto que esto es importante siempre, pero lo es aún más el primer día (o las primeras semanas). No te quejes (aunque tus quejas relacionadas con tu vida personal), las actitudes negativas son tóxicas y te alejarán de tus compañeros.
  • Sé discreto. El primer día no hace falta que cuentes todas tus intimidades o tu vida personal. Ya tendrás tiempo de hacerlo cuando cojas confianza.
  • Pregunta, pero sin exceso. Está claro que el primer día tendrás muchas preguntas que hacer. Te saldrán muchas dudas. Y debes hacerlas, claro que sí. Pero con moderación. No debes atosigar a la persona que te esté ayudando a incorporarte. Y recuerda, muéstrate agradecido. No olvides decir gracias.
  • Apúntate a los planes sociales. Si tus compañeros te ofrecen ir a tomar un café o a comer juntos, no rechaces la invitación. Compartiendo tiempo fuera de los quehaceres de la empresa ganarás confianza.

Vía Adecco

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