Lo conocí en el trabajo, fue todo tan rápido, los dos queríamos huir de diferentes cosas y encontramos una salida en el otro, una excusa, pero no éramos para estar juntos, fuimos impulsivos siendo adultos.
Yo adopté dos gatos, siempre dije que me gustaban, que sentía que sanaban. A él no, no le gustaban pero por un momento hizo el intento de convivir conmigo y con ellos. Él siempre decía que le parecían traicioneros, y no fieles como los perros.
Arrendamos y nos fuimos a vivir juntos al poco tiempo. Pero él huyó, ahí supe que yo era una excusa, pero saben quién se quedó? Mis gatos, los que se supone que son traicioneros, durmieron conmigo todo el año que me la pasé llorando en las noches, no me dejaron nunca sola, en esa casa q se supone que era para los dos.
Esos gatos feos y sucios según él, me salvaron de la tristeza, me acompañan. Al final, quién es el traicionero?
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