Todos en algún momento hemos tenido que estudiar para un examen importante. Para captar todo en un dos por tres, recurrimos a métodos muy populares pero poco eficaces, que la verdad, no consiguen que retengamos toda la información que queremos, te decimos por qué.
1. Usar la laptop, tablet o celular cada 5 minutos
Parece que es imposible concentrarse en el cuaderno o libro, así que recurrimos a estos aparatos que en realidad a veces nos distraen más. Si tiene conexión a Internet, peor.
2. Hacer cálculos inútiles
“Tengo que leer 300 páginas, si leo una por minuto entonces terminaré en media hora, pero si primero me preparo un café entonces…” Y ahí se te fue UNA hora.
3. Ordenar el sitio donde estudiarás
Es tanta nuestra negativa, inconsciente, a estudiar, que ordenamos todo al milímetro, por tamaño, color, fecha en la que lo compramos, etc. El ‘chiste’ es hacer tiempo.
4. Subrayar como si el resaltador estuviera poseído
Nos dicen subraya lo más importante, y 300 páginas después, las hojas ya no son blancas si no amarillas de arriba a abajo.
5. Visitar al refrigerador
Comer nos dará sueño, lo sabemos pero aún así seguimos la tortura para no sentirnos tan solos a la hora de estudiar.
6. Tratar de averiguar cómo van tus amigos
Mandas sms, whatsapps, mensajes en Facebook, Twitter etcétera, con el propósito de saber si ya comenzaron a estudiar, en lugar de que tú lo hagas.
7. Competir por quien está peor
Parece que compites cuando hablas con tus amigos diciendo: “No sé nada, mañana voy a jalar”, y el otro “No, yo voy a jalar, no tengo ni apuntes”.
8. Piensas en el tiempo que perdiste
Piensas en todo lo que hiciste antes y te deprimes pues ya llegó la noche, pero aún así no has empezado a estudiar.