Lenguaje corporal: ¿cómo mostrar lo que queremos y cómo reconocer el comportamiento de los demás?

El lenguaje corporal es todo lo que “decimos” con nuestros gestos y posturas. Aún inconscientemente cada vez que hablamos gesticulamos y nos movemos permanentemente. Es por eso que conocer el lenguaje es una buena herramienta no sólo para “leer” a los demás sino también para potenciarnos a nosotros mismos.

Para empatizar con alguien enojado o triste

Ponte a su lado derecho y mira en la misma dirección que él. Eso le dará una sensación de solidaridad.

Para parecer confiado y seguro

Ponte derecho y estira piernas y brazos. Concédete un instante para reponer fuerzas.

Un buen apretón de manos

Es un punto importante en el lenguaje corporal. El apretón de manos no debe ser ni fuerte ni blando, sino firme. Además debe la posición debe ser con la mano puesta en vertical y de forma recta.

Dar un buen abrazo

Un buen abrazo no lleva palmadas. Si las das parecerás incómodo y la otra persona sentirá que lo único que quieres es soltarlo.

Ser convincente

Cuando necesites persuadir usa tus manos, no las mantengas escondidas. Si haces esto último, puede parecer que escondes algo.

Mostrarte interesado y concentrado

Junta la punta de tus dedos sobre la mesa cuando estés en una conversación importante o en una reunión. Denotarás concentración, interés y poder de reflexión.

Saber si eres bien recibido en un grupo

Fíjate en la posición de los pies cuando llegas. Si se giran totalmente hacia ti, es una buena señal.

Detectar una mentira

Eso difícil estar seguros que alguien está mintiendo. Los especialistas suelen fijarse en si la persona se tapa la nariz o la boca mientras lo dice, si fruncen los labios o miran con avidez hacia otro lado. Aún así no se pueden apresurar con las conclusiones.

Detectar incomodidad

Para saber si una persona se encuentra incómoda, pon atención a su postura. Si está sentado con una pierna sobre otra y aparente ser pequeño de lo que realmente es, está incómodo.

Buena recepción con las mujeres

Si se arregla el pelo, mira de manera persistente y sonríe, vas por buen camino. Si por el contrario, no hay contacto visual o cruza los brazos, mejor no lo intentes.

 Fuente: Forbes