Vía adnradio.cl
“Padrino a medida” es la campaña con la que el recinto espera recaudar fondos para asegurar su funcionamiento, detenido tras el estallido social y la pandemia.
Un espacio que ha sido particularmente dañado con la pandemia es el Buin Zoo, que tuvo que cerrar sus puertas, viendo escasear sus recursos para mantener y alimentar a los 2.800 animales de 260 especies que allí habitan.
Por eso, el llamado es a buscar “Padrinos a medida”: 20 mil socios que entreguen un aporte mensual o único para poder mantener a los animales hasta reabrir sus puertas. “Nadie estaba preparado para estar cerrado cinco meses. Ni en las películas más terroríficas nos lo hubiéramos imaginado”, expresó en Ciudadano ADN el fundador del Buin Zoo, el veterinario Ignacio Idalsoaga.
Una crisis que viene desde el estallido social,cuando “teníamos todo un equipo preparado para hacer las actividades de fin de año de empresas, y no existieron”, que los hizo partir este año debilitados, y se agravó a contar de la explosión del Covid-19 y sus restricciones sanitarias, perdiendo además del flujo normal de visitantes, las habituales visitas de colegios.
“No tenemos ninguna otra forma de conseguir recursos que el acceso que paga el público por ingresar”, recordó Idalsoaga. Sin embargo, cuenta que toda esta situación les ha servido “para ponernos en el concierto latinoamericano en un lugar que nos costaba imponernos”. Reuniones por Zoom con directores de más de 80 zoológicos para analizar los pasos a seguir frente a la crisis les permitió “darnos cuenta de lo importantes que somos”.
De hecho, el Buin Zoo está dentro de los 3 zoológicos con más costo de operación en el continente, principalmente por el tipo de animales y su consumo de comidas especiales. “Eso nos hace tener un complejo panorama”.
A la hora de hablar de los animales que están con mayor riesgo, según Idalsoaga, “los que hemos sufrido más somos los animales de dos patas”: del equipo humano de 350 personas que trabajan en el zoológico, la mitad está acogida a la Ley de Protección del Empleo, y 80 se mantienen trabajando directamtente con los animales a través de turnos éticos. “Hemos tenido que ser fuertes contra la adversidad y tratar de que los animales no se resientan con nada. Hemos tenido que cambiarles dietas y ajustarnos, tal como en todas las familias del país”.
Sin embargo, el directivo agradece que en el zoológico han estado “muy acompañados en estos momentos duros. Hemos sentido el cariño incondicional de la gente que nos llama. Creo que en estos 25 años hemos estado sembrando una semillita en el corazón de muchas familias”.
Para quienes decidan apadrinar alguno de los animales del zoológico, hay distintos packs para “elegir según el bolsillo”, y que incluyen regalos que van desde videos de agradecimiento personalizados de Dr.Zoo, hasta peluches y vasos reutilizables, además de entradas canjeables cuando el BuinZoo vuelva a estar abierto. Además, Makupa Market, la tienda online del recinto sigue en marcha, ante la necesidad de reinventarse, y ha tenido una gran recepción del público. “No vendimos nunca una pantufla, pero ahora se agotaron”.
No existe claridad respecto a una fecha de reapertura del zoológico. “Ha sido tan duro esto que ni pensamos en eso. En marzo creíamos que nos íbamos de vacaciones y reabríamos para Pascua de Resurrección a todo evento”. Aún así, Idalsoaga espera que ese momento llegue “entre 3 y 4 semanas más”, aunque “con un aforo muy pequeño. Eso nos da mucho susto, porque tiene un costo altísimo. Tenemos la duda de si vamos a poder cubrir nuestra operación, pero queremos traer a nuestros trabajadores de vuelta”.
Idalsoaga recordó que el Buin Zoo es “el primer zoológico B en el mundo”, certificación internacional que los reconoce como una empresa “cuyo único propósito no es el lucro, sino que el tema ambiental es tanto o más importante que lo otro. Vivimos para conservar la naturaleza y dejar este mundo mejor”.