Negociar el sueldo: una técnica que se aprende

El enfrentarse a una entrevista de trabajo siempre puede ser una experiencia, más aún si la persona está dando sus primeros pasos en el mundo laboral. Quizás los primeros intentos por entrar a una empresa pueden ser negativos por la cantidad de detalles desconocidos para los postulantes, como que lenguaje ocupar, que postura asumir, que tipo de ropa usar para la ocasión.

Dentro de esos puntos a tener en consideración, también se cuenta el cómo negociar el sueldo, un tema que si se maneja de forma equivocada puede echar por tierra todo el esfuerzo y la preocupación por causar una buena imagen en el empleador. En este sentido algunos expertos aconsejan que no sea el candidato quien de la primera cifra, principalmente porque de ser muy alta se cerrarán casi automáticamente las puertas.

Saber esperar, el secreto del buen negociador

Acá lo recomendable, es simplemente esperar hasta que la compañía de un número y a partir de eso negociar. Para ello, se debe tener claro cuál es la situación de la carrera que se estudió en el mercado, cómo están valorizados sus profesionales y cuáles son las rentas promedios que perciben los recién egresados. Manejando esa información se estará en condiciones de sentarse y llegar a un acuerdo conveniente.

Otra técnica puede ser el de pedir tiempo para pensar en la propuesta que dé la organización, dejando en claro que no cumple con las expectativas pero que las intenciones de trabajar allí siguen intactas, ya sea por la proyección que representa el puesto, por la importancia de la empresa o por los desafíos que se está dispuesto a asumir.

Se debe tener presente que todas estas conversaciones se deben hacer cara a cara y las veces que sean necesarias. Si bien el teléfono puede ser más rápido, es casi seguro que no se obtendrán los mismos resultados.

Saber ser flexible

Otro tip a tener presente es saber hasta dónde llegar en la negociación, pues las empresas manejan presupuestos bastante estrictos que difícilmente sobrepasan al tratarse de contratación de personal. Hay que saber reconocer entonces cúal es el techo que se puede alcanzar. De no estar conforme hay que buscar mejores condiciones anexas a lo económico, como tiempos de ascenso, vacaciones, aguinaldos u otro tipo de beneficios.

También es prudente saber qué tipo de rentas es la que se está negociando, pues el sueldo líquido dicta mucho del bruto. Hay que estar claro que el primero corresponde a la remuneración que se recibe luego de los descuentos por conceptos de Isapre, AFP y otro tipo de rentenciones impositivas y el segundo es lo que realmente llega a fin de mes.

No es bueno encontrarse con la sorpresa de un sueldo menor al pactado, simplemente porque no se consultó si se traba del líquido o bruto. Por ello se recomienda siempre llevar a delante las conversaciones de las rentas futuras en términos netos.

FUENTE: http://empleo.universiablogs.net/2012/01/20/negociar-el-sueldo-una-tecnica-que-se-aprende/

Previous Post

¡Carpe Diem! ¿Estas aprovechando tu día?

Next Post

Soy nuev@ en mi trabajo

Related Posts