Desde el mes de junio a la fecha, más de 330 ballenas muertas han sido halladas en las costas de la Patagonia en nuestro país.
Las explicaciones todavía no se han dado, y las autoridades se encuentran ahora investigando la causa de uno de los varamientos más grandes a nivel mundial.
Hasta el momento se han contabilizado 305 cuerpos y 32 esqueletos de ballenas de la especie Sei muertas en las costas del sur, informa ‘National Geographic’.
«Nos pareció una imagen apocalíptica. Nunca había visto nada igual. […] Todavía hay muchas áreas a las que no pudimos llegar, así que es probable que haya más ballenas muertas», explicó a AFP Vreni Häussermann, directora del Centro Científico Huinay, cuya expedición halló los animales.
Una de las teorías que se baraja, es la llegada de la marea roja, la cual se configura como un rápido aumento de algas marinas microscópicas que pueden cambiar el color del agua y además puede causar efectos tóxicos.
Una investigación de las autoridades chilenas concluyó que no hubo intervención humana en la muerte de los cetáceos. «El análisis inicial indica que todos los especímenes murieron a la vez», explica Häussermann.